En el Ripollés, en pleno Pirineo catalán y escondida entre montañas, se encuentra la Vall de Ribes, un conjunto administrativo de pueblos rurales en los que disfrutar como en ningún otro sitio del concepto de slow days. Los minutos en la Vall de Ribes pasan lentos, pero lejos de ser tediosos es una auténtica suerte para el viajero que llega a la zona en busca de paz, tranquilidad y pasar su tiempo respirando aire puro.
Estos son los pueblos que conforman la Vall de Ribes: